viernes, 20 de marzo de 2009

Dante contra las flores

Ya pasaron once días y Dante Magoya continúa parapetado en una fosa que cavó en el fondo del hospital neuropsiquiátrico donde se encuentra internado. Por suerte, un amigo imaginario que tenemos en común, nos hizo llegar este texto escrito por él.



Por suerte ya no estoy amarrado y puedo sostener esta ruedita de plástico en mi frente. Cierro mis ojos, respiro profundo y la apoyo en un párpado y luego en el otro hasta alcanzar la calma. Este amuleto fue construido por las hormigas fantasmas para protegerme de la amenaza de las flores. ¡Esas horribles y espantosas flores! Siempre que me asomo a la ventana de mi celda, las veo... vigilandome... A veces en el silencio de la noche, escucho su respiración.

Parecen muy inocentes, pero me invaden. Me invaden con su pólen. Ingresa sigiloso por la ventana, me envuelve y me asfixia. Y quedo en el piso desvanecido; vencido por el ataque brutal. Y siento un ardor insoportable en toda mi piel, como si las flores pudieran rasguñarme a la distancia.

Pero lo peor es cuando las flores comienzan a crecer dentro de mi mente y todo lo que veo se transforma en flores. En esos momentos grito desesperado y tiemblo enfurecido y pienso es hora de pulsar el botón rojo que tengo pintado en la pared para que todo comience a desinflarse.

Por suerte las hormigas fantasmas crearon esta ruedita de plástico para protegerme de su maldad y violencia. Por suerte ya no estoy amarrado y puedo sostenerla en mi frente hasta alcanzar la calma.


NOTA: Pueden escribir todos los comentarios que deseen, menos para preguntar: ¿Qué demonios es esto? o: ¿Y esto qué significa? Esta limitación se debe a que nosotros no tenemos la menor idea de lo que quiere decir y estamos tan perplejos como ustedes.

La dirección.

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